¿Qué es un desgarro muscular? ¿Te suena ese dolor repentino que te impide mover una parte del cuerpo tras un esfuerzo o un mal movimiento?
Los dolores, las sobrecargas y las agujetas surgen de forma habitual cuando intentamos ponernos en forma. Sin embargo, los desgarros musculares (también denominados distensiones) pueden ser más problemáticos y dolorosos.
Los deportistas o las personas que practican actividad física y que fuerzan el cuerpo más allá del punto de rotura -haciendo repeticiones forzadas o entrenamientos extremos- son muy propensos a sufrir lesiones más intensas, entre las que se incluyen los desgarros musculares.
Esto también les sucede a las personas que inician un deporte o una rutina deportiva sin preparación, aunque ¡ojo! Los desgarros musculares también pueden surgir de un accidente laboral. En Paula Vega Fisioterapia te contamos cómo tratar estos desgarros y te damos algunos consejos para prevenirlos desde el principio.
¿Qué es un desgarro muscular?
Un desgarro muscular consiste en la rotura de fibras musculares.
Los desgarros musculares suelen producirse cada vez que el músculo se tensa o se estira en exceso. Esto puede ocurrir como resultado del agotamiento y la fatiga tras un esfuerzo, también por una postura o una práctica inadecuada o por exceso de actividad física. Aunque cualquier músculo puede verse afectado, los desgarros musculares se producen con más frecuencia en la zona de gemelos e isquiotibiales.
Los desgarros musculares se clasifican en función de la gravedad de la lesión:
• Leve: una simple distensión que afecta al 5% de las fibras musculares.
• Moderado: del 5% hasta el 25%-30%, va acompañado de una disminución de la amplitud de movimiento y dolor.
• Grave: un desgarro muscular propiamente dicho y va acompañado de una gran inflamación y dolor.
Síntomas de los desgarros musculares
Cuando se produce un desgarro muscular, aunque sea leve, la persona lo sabe de inmediato. El dolor y las agujetas se manifiestan casi de forma inmediata, así como inflamación en la zona afectada. Dependiendo de la gravedad de la distensión, es posible que a la persona le resulte difícil mover la zona, si es que puede hacerlo.
También es posible notar una inflamación, así como hematomas y decoloración, acompañados de una sensación de “nudo” o rigidez. Si la distensión o el desgarro son agudos y graves, normalmente provocados por un accidente como un resbalón, una caída, un choque o el sobresfuerzo al levantar objetos pesados, el paciente puede verse obligado a buscar tratamiento inmediato.
Recuperación de los desgarros musculares
La recuperación de una distensión o un desgarro leves puede tratarse con un fisioterapeuta y se puede acompañar de gestos en casa como reposo, hielo, compresión y elevación.
Una distensión o desgarro muscular moderado suele tratarse de forma similar, pero durante más tiempo. Se recomienda volver a la actividad de forma normal cuando se recupera una amplitud de movimiento completa sin dolor. Los desgarros moderados requieren de fisioterapia.
Un desgarro grave que requiera reparación quirúrgica puede tardar meses o más en curarse. En este caso, se recomienda seguir tan solo las indicaciones de profesionales. Puedes consultar a nuestro equipo de fisioterapia en Leganés si lo deseas.
Prevención de los desgarros
En la mayoría de los casos, los desgarros musculares se pueden prevenir realizando las técnicas de calentamiento adecuadas y no forzando nunca un músculo frío para que funcione a pleno rendimiento.
Hacer ejercicio con una postura adecuada en cualquier actividad también es fundamental para prevenir este tipo de lesiones, así como trabajar la movilidad.
Es muy importante conocer los límites de nuestro cuerpo y recordar que cuando se trata de llevar el cuerpo al extremo, no existe el “no pain no gain”. De hecho, el dolor suele ser la primera señal de que un músculo se ha lesionado. Aprende a conocer tu cuerpo y a entender sus señales pare evitar lesiones innecesarias y para lograr un rendimiento máximo continuado.
¿Qué hago si tengo un desgarro muscular?
Lo mejor es pedir cita con tu fisioterapeuta. Cuando el desgarro muscular es grave y se requiere de rehabilitación, es esencial confiar en profesionales con experiencia en el tratamiento de este tipo de lesiones. En Paula Vega Fisioterapia te acompañamos en tu rehabilitación.